lunes, 7 de febrero de 2011

Otoñalmente veraniego.

¿Así que es otoño en pleno verano? ¿Así que a febrero le salieron las primeras canas? Será que el ambiente se mimetiza conmigo, porque hoy justamente siento que es otoño en mí.
De mis ojos no caen lágrimas sino hojas secas, y mi corteza entera se reseca y resquebraja. ¿Qué es esto sino un otoño prematuro, una consecuencia del cambio climático, una existencia desvaneciéndose?
Hoy empezó el otoño en mí, por ende voy a meterme en mi cama y taparme hasta la nariz, a ver si tu olor en mis sábanas me saca un poco lo gris, si el recuerdo de nuestras noches veraniegas se filtra en mis raíces y me devuelve un poco de lo que alguna vez fui.

Delia

2 comentarios:

  1. Me encantó, tengo que decir. La forma en que te expresás, no lo que contás porque, bueno, no tengo por qué explicarlo.
    Escribir nos ayuda a sanar, nos libera... espero que vos puedas hacerlo, si es que no aun no pudiste.

    Te sigo leyendo

    ResponderEliminar
  2. Muchísimas gracias, Jade, por leer, por interpretar, y sobre todo por comentar.

    ResponderEliminar